Una película muy inteligente, emocional, con un detalle muy sutil al principio: Mandy quiere decir "la que merece ser amada". Aparentemente es una película didáctica sobre los niños sordomudos. Pero Mackendrick no se detiene ahí. Mete el bisturí a fondo indagando en el matrimonio, la familia, la infancia, la educación, el amor posesivo, el amor desapegado, los celos, la envidia, la soledad, los chismorreos, la comunicación, la vocación, la renuncia, y un montón de sentimientos en apenas hora y media. Muy interesante, no te lo pierdas. Sinopsis / El matrimonio Garland (Terence Morgan y Phyllis Calvert) vive feliz con su hija Mandy (Mandy Miller) hasta que un día se dan cuenta de que la niña es sordomuda. Deciden, para protegerla, instalarse en casa de los abuelos, para que no sufra del contacto con otros niños en la escuela. Cuando la niña cumple seis años su madre decide llevarla a una escuela especializada, lo que provoca un conflicto con su esposo y sus suegros... ¡Disfruta la película!