Protagonista de películas clásicas como “Sabrina”, “My Fair Lady” y por supuesto “Desayuno con diamantes”, Audrey Hepburn llevó un estilo y una gracia naturales a la pantalla. En 1954, ganó el Premio de la Academia a la Mejor Actriz por “Vacaciones en Roma”. Figura inspiradora y modelo a imitar, Audrey dedicó mucho tiempo y esfuerzo en sus últimos años en calidad de Embajadora de Buena Voluntad del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. Una mirada muy especial a uno de los iconos de Hollywood más memorables y preciados.