La película comienza en 1944 en plena Segunda Guerra Mundial, cuando Lecter era un niño de ocho años viviendo en el castillo de su familia en Lituania. Su familia es obligada a retirarse a su casa de campo para eludir las tropas alemanas. Sin embargo, un tanque soviético llega al lugar buscando agua y los soldados ordenan que todos salgan de la casa, pero un bombardero alemán Junkers Ju 87 descubre a los soviéticos y mata a todos excepto a Hannibal y a su hermana, Mischa.
Mientras tanto, en el castillo, seis lituanos "Hiwis" (Grutas, Dortlich, Grentz, Kolnas, Milko y Pot Watcher) le piden permiso para unirse a la Waffen-SS a los nazis que ocupan el lugar, pero el mismo es denegado. Después del ataque soviético, Grutas mata al comandante de la SS y le quita su Cruz de Hierro. El avance de las tropas rusas obliga a los mercenarios a esconderse en los bosques, en donde encuentran la casa de campo de los Lecter. Sin embargo, al no encontrar ninguna fuente de alimento, asesinan a Mischa y recurren al canibalismo.
Ocho años más tarde, Hannibal vive en el castillo, el cual ha sido convertido en un orfanato por la Unión Soviética. Hannibal no habla con nadie y es excluido por los demás niños. Lecter escapa del orfanato, viaja a París, en donde vive junto a su tía política, Lady Murasaki, quien le enseña a hacer arreglos florales y kendo. Mientras ambos realizan compras en un mercado, un carnicero hace un comentario misógino sobre Lady Murasaki, por lo que Lecter lo busca y lo decapita. El inspector Popil, un detective francés, sospecha de Lecter pero gracias a la ayuda de su tía, el crimen permanece impune.
Posteriormente, Lecter empieza a estudiar medicina y trabaja embalsamando cadáveres. Sin embargo, atormentado por el pasado, decide regresar a Lituania a buscar a los responsables por la muerte de su hermana, así que va a la casa donde estuvo cautivo junto con Mischa y encuentra las placas de identificación de los soldados, unas perlas que escondió su madre y unas cartas en un cajón. Dortlich, quien ahora es un oficial fronterizo, sigue a Hannibal con la intención de asesinarlo, pero Lecter lo captura, lo obliga a revelar el paradero del resto de los mercenarios y lo ejecuta. El asesinato de Dortlich alarma al resto de la banda, por lo que envían a Milko a matar a Hannibal, pero éste lo descubre y lo ahoga en un tanque para cadáveres.