El 29 de abril de 2010 Diego "El Cigala" grabó en directo su disco, ganador de un Grammy Latino, Cigala&Tango en un solo concierto en el mítico Gran Rex de Buenos Aires.
Con esta aventura Diego se inicia en los caminos de la música argentina, con colaboraciones como Andres Calamaro, Juanjo Domínguez y Néstor Marconi.
Aunque ya había grabado antes algún tango, el calor del público y la conexión con los músicos bonaerenses le animó a llevar a cabo esta nueva interpretación del tango.
Un repertorio de grandes autores que van desde Carlos Gardel a Astor Piazzolla pasando por Atahualpa Yupanqui en el que El Cigala dice encontrar el mismo sentimiento que en el flamenco.
Las cuarenta (Tango)
Créditos:
Autor: Roberto Grela y Francisco Gorrindo
Voz: Diego "El Cigala"
Piano: Jaime Calabuch "Jumitus"
Guitarra: Diego Del Morao
Contrabajo: Yelsy Heredia
Percusión: Sabú Porrina
Letra:
Con el pucho de la vida apretado entre los labios,
la mirada turbia y fría, un poco lerdo el andar,
dobló la esquina del barrio y, curda ya de recuerdos,
como volcando un veneno esto se le oyó acusar.
Vieja calle de mi barrio donde he dado el primer paso,
vuelvo a vos, gastado el mazo en inútil barajar,
con una llaga en el pecho, con mi sueño hecho pedazos,
que se rompió en un abrazo que me diera la verdad.
Aprendí todo lo malo, aprendí todo lo bueno,
sé del beso que se compra, sé del beso que se da;
del amigo que es amigo siempre y cuando le convenga,
y sé que con mucha plata uno vale mucho más.
Aprendí que en esta vida hay que llorar si otros lloran
y, si la murga se ríe, hay que saberse reír;
no pensar ni equivocado... ¡Para qué, si igual se vive!
¡Y además corrés el riesgo de que te bauticen gil!
La vez que quise ser bueno en la cara se me rieron;
cuando grité una injusticia, la fuerza me hizo callar;
la experiencia fue mi amante; el desengaño, mi amigo...
¡Toda carta tiene contra y toda contra se da!
Hoy no creo ni en mí mismo. .. Todo es grupo, todo es falso,
y aquél, el que está más alto, es igual a los demás...
Por eso, no has de extrañarte si, alguna noche, borracho,
me vieras pasar del brazo con quien no debo pasar.