Primer trabajo europeo de Kubrick tras su exilio voluntario de los Estados Unidos, y un arrasador éxito de taquilla. Pero no así de crítica, ya que ésta arremetió ferozmente contra el director por cuestionar el sistema defensivo norteamericano. Igualmente el propio gobierno norteamericano se encaró con Kubrick acusándolo de falsear una realidad imposible. Ya antes, el Pentágono había negado cualquier tipo de ayuda a los productores de la película.
En España, además de no llamarse "Dr. Insólito", que era su verdadero nombre en español, tuvo problemas con la censura franquista y eso retrasó su estreno 2 años. La edición en DVD ofrece una escena censurada en su día por su contenido erótico.